viernes, 18 de septiembre de 2009

De las semanas tremendas

Esta semana me reintegré al trabajo luego de una semana en cama. A ver, no es que disfrute de estar enferma, aunque algunos beneficios fueron bienvenidos… ¡Pero volver a la oficina a veces es una tortura!

Empecé la semana dándome cuenta de que puedo estar una semana entera alejada de mis tareas y comprobar que nada, pero NADA eh, sucede. O sea, la empresa sigue funcionando lo más bien. Lo que se atrasa de mi trabajo puede hacerse de todos modos cuando yo regreso y decido hacerlo. Y lo que no puede esperar es hecho por otra gente, bien, mal, no importa. Mi ausencia no hace mella en nada, NADA. O sea, qué incentivo tengo para venir a la oficina? No soy imprescindible, no hay un solo tipo que valga la pena, lo que hago no me entusiasma por ahora, vengo sólo por el sueldo? Sí. Vengo sólo por el sueldo.

Decidí salir el martes a cenar, me acosté tarde. El miércoles seguimos con el reencuentro de la primaria, esta vez los solteros/divorciados/separados que, sin hijos, decidimos vernos para una salida adulta, con alcohol incluido. Me volví a acostar a las 3am. De más está decir que el jueves fue un día durísimo… Calavera no chilla.

Pero el detalle de la semana, además de la lluvia y el frío que regresa para dejarnos duritos antes de la llegada de la primavera, lo dieron las ausencias… En fin, el que se va sin que lo echen…

Esta mañana, en medio de mi malhumor por el arrastre de sueño y el convencimiento de lo expuesto en el segundo párrafo, escucho en el taxi que me tuve que tomar porque me quedé dormida, el programa del pelotudo de Beto Casella. A ver, no me molesta que diga chistes idiota, no me molesta que haga comentarios frívolos, no me molesta siguiera la gallega que habla al pedo. Lo que me rompe soberanamente las bolas es la capacidad que tiene cada uno de ellos, que se dicen especialistas en chimentos en hablar de cosas que no tiene idea. A ver, Beto, gallega, ignorantes: Soon Yi no es la hija de Woody Allen, el padre adoptivo de Soon Yi es el famoso director de orquesta André Previn. No resisten una wikipedia…

Por otro lado, además de los comentarios ignorantes sobre este tema, luego se despacharon a lo grande con comentarios racistas sobre las relaciones interraciales que me sacaron. Y saben qué? Si la nueva Ley de Radiodifusión, que admito desconocer en su totalidad como proyecto, puede evitar un 10% de lo que estos infelices hacen, es bienvenida.

Pero no habla de eso, no? No habla de responsabilidad periodística, ni de chequeo de fuentes, ni nada… Ok…

Qué semanita… Y la de ustedes qué onda?

2 comentarios:

Vir dijo...

Ufff cómo estábamos! Menos mal que la semana terminó genial anoche! Besoss

Paula Cautiva dijo...

Qué buena noche la de anoche Teté!!! jajajajaja