viernes, 15 de agosto de 2008

De por qué o me gusta viajar en colectivo - Oda negativa al 130

Si tengo que elegir, de los medios de locomoción que me llevan y me traen de la oficina, el que más me gusta es la camioneta de mi amigo Leo. Leo maneja bien, me tiene pre-progamada la Rock&Pop en la radio y me deja escuchar el programa de la Negra sin escandalizarse.

Pero como Leo no me puede pasar a buscar por mi casa a la mañana, y a la tarde no siempre coinciden nuestros horarios de salida, por lo general me tengo que conformar con el 130.

De las aveturas urbanas el viaje en colectivo en hora pico debe ser uno de los más azarosos. Nunca entiendo por qué algunas mañanas engancho colectivo vacío y otras viajo con el nuevo servicio de codopuntura, además del transporte, y todo al mismo precio. Pero esto no es lo que me molesta.

Todos los choferes de la 130 son unas bestias al volante. No importa la hora. No hay día que no pasen semáforo en rojo. O que aceleren para hacer 50 metros, para luego frenar y hacer montoneras de pasajeros a sus espaldas. Y qué decir de las veces que, vacíos, te cierran la puerta en la cara, y te dejan pagando en la parada, con ganas de romperles a martillazos los faroles.

Agrega a mi disgusto en el uso de un servicio público no exclusivo, la mala educación de algunas personas. Te pisan, te pasan los brazos por la cabeza como queriendo recrear la decapitación de María Antonieta, te empujan sin piedad ni miramientos (tampoco te piden permiso). Ayer, sin ir más lejos, estaba sentada, una señorita me dio un rodillaso, justo en la rodilla que tengo un moretón de proporciones apocalípticas. Qué le iba a decir? La iba a matar? (ganas no me faltaban).

Capítulo aparte para los que suben a un transporte público en el que se viaja como ganado y no piensa que su aroma, que es precisamente a ganado, no se va a oler. El hediondo no se huele decía mi abuelita, con mucha razón.

No hay caso, yo tendría que haber sido millonaria... Así compraba la 130 y viajaba sola todas las mañanas!!!

Y ustedes qué padecen en su viaje al trabajo?

5 comentarios:

ann dijo...

que me dicen de intentar tomarse el subte d a las 18.00 hs????
es la ley del más fuerte ....

Anónimo dijo...

concuerdo con ann... pero paula cautiva, mi papá es chofer del 130! no, mentirita... coincido con que más de una vez, viajar en colectivo es toda una odisea...
quiero destacar un caso positivo, sin embargo. en la línea 41 hay un chofer que a cada persona que sube le dice "buen día", agradece la compra del boleta, ayuda a las personas de edad avanzada, y a las señoras grandes les tira un par de piropos para levantar su autoestima. una joya el señor, la próxima la pregunto el nombre!

EmmaPeel dijo...

Del transporte público lo que me pone asesina serial mal son los pungas, saldría con el comando garza sosa al grito de "andá a robar al citi, puto!"

Paula Cautiva dijo...

Ann,
Los subtes metropolitanos son un insulto al medio de transporte público. Pero peor la pasan los japoneses... Alguna vez viste en youtube los videitos de los "empujadores"?

Lala,
No recuerdo en qué línea, creo era la 113, que había un chofer que era un espectáculo también, hacía chistes, contaba cuentos... Lástima, son los menos. Abundan los que aceleran cuando las viejitas no se han sentado aún, los que les cierran la puerta sin que hayan salido de las escaleras, aceleran mientras se están bajando...

Emma,
Meki seguro que se prende en la cruzada anti punga. Yo creo que castigo mínimo es tirarlos del micro en movimiento al grito de "A ver si te quedan ganas, hijo de una gran piiiiiiiiiiiiiiiiii"

Au drey dijo...

Yo tengo mi punga personal, el que me afanó hace 4 años. Cada tanto nos reencontramos, nos reconocemos, nos medimos. A veces me faja, a veces no. Trato de evitar el 62 en esa franja horaria.