lunes, 14 de abril de 2008

De cómo las madres condicionan...

Cuando era bebé mi mamá tenía pánico que me muriera de frío. Helada. Entonces me emponchaba como para pasar el invierno a la intemperie en la Antártida. Y no para salir de casa, para dormir en mi cuna!

Cada vez que me mudé, la preocupación más grande era que la casa tuviera calefacción, que no pasara frío. Me ha regalado por lo menos 3 mantas y pijamas calentitos a millones.

No es casual que cuando llegan los tiempos frescos, como este fin de semana, si voy al súper me encuentro mirando las mantitas... Sin importar que en casa tenga dos de polar, frazadas al por mayor, siempre me encuentro mirando las mantitas. Me encantan sus colores, las texturas, cómo las doblan hechas un rollito... Y hago un esfuerzo sobrehumano para no comprar una, varias o todas en ese mismo momento.

Madre, sabelo, te culpo por mi adicción a las mantas. Pero se duerme tan lindo cuando hace frío acurrucada como un capullo en las mantitas de polar!

6 comentarios:

Anónimo dijo...

yo soy adicto a las mantas
cero friolento
pero soy feliz mirando peli en mi manta escocesa o una de aerolineas egipcias del año 70 ultra lo mas
cariños y mil gracias por la onda a la flojita siemrpe
A

Paula Cautiva dijo...

Querido A:
Yo en casa tengo mantas de polar en todos lados. Nada más lindo que mirar pelis envuelto en una. Lloro la pédida de una mantita de Alitalia que nunca más volví a ver...
La Flojita se merece el aguante siempre!

Siesta escandalosa dijo...

Alitalia: a cuadritos azules, rojos y filón amarillo
Air France: creo que gris.
Malassyan Airlines: violetita.
También hay una roja. La más linda.
Soy gran hurtadora en tránsito. Cuando llego a destino, me concentro en los hoteles: cubiertos, platos (debilidad summun) y hasta una bandeja de Le Bristol. Vengo en baja con los ceniceros.

Alba Del Rio dijo...

lo de las madres condicionantes... uff... tengo tanta letra como "la Acher..."(Algo sobre mi madre, todo sería demasiado")...
Me encanto este blog de las mantitas, me dio risa identificarme con las manias que te dejan caladas... pero sólo cuando estuve a punto de perder a mi vieja me di cuenta que si la perdia, todas las manias que me había "dejado" iban a ser las cosas que de ella iban a estar siempre en mi. Como si a través de los miedos inculcados, tuviera menos miedo a perderla. Gracias por lo que escribis!! Vero.

EmmaPeel dijo...

Somos Mantas Fan también

Paula Cautiva dijo...

Siesta:
La mía de Alitalia era azul y beige...

Vero:
Gracias por pasar. Seguiremos armando las historias de las abuelas y otras mujeres que somos todas.

Emma:
Las mantitas son lo más!