lunes, 20 de diciembre de 2010
De la suerte
Cuando voy a recitales, sí plural, siempre me cambian a una ubicación mejor. Mi sobrina Lara y mi amiga Romi pueden dar cuentas de ello.
Cuando un trabajo comienza a ser tedioso, odioso, y ya no soporto mi vida, me ofrecen otra oportunidad mucho más linda e interesante. Mi actual trabajo es prueba de ello.
Cuando pensé que ya no me iba a enamorar nunca más, que ok, la vida de tía piola soltera estaba más que bien para mí... vuelve a mi vida la persona que más me conoce, más que yo misma. Y me deja una declaración de amor por escrito, en este mismo blog... y tengo la certeza que voy a ser feliz y que no voy a ser por mucho más tiempo la tía piola soltera...
Y pienso... qué hice para merecer tanta dicha? Para tener la calidad de amigas que tengo? O el jefe que tengo en el trabajo? O divertirme y que me paguen por hacerlo? O recuperar al amor de mi vida cuando pensé que ya no era posible?
La verdad no lo sé, pero estoy segura de que tiene que ver con mi suerte y con la onda que le pongo a las cosas...
Y ustedes? En qué andan? Cómo despiden este 2010?
lunes, 1 de noviembre de 2010
De los días uffff
Por lo general me toma un par de horas, pongo perspectiva, me tomo un café, miro los distintos fragmentos que componen mi vida, cómo ensamblan un maravilloso mosaico y luego respiro mejor, con la certeza de que todo va a salir bien y que todo va a encajar perfectamente.
Pero a veces, como hoy, que es lunes y los lunes son mi kriptonita, no logro encontrar una sóla pieza del rompecabezas que tenga un color que me agrade. Son todas grises, oscuras, opacas. No encuentro ni un solo destello que me lleve hacia la zona solar de mi personalidad. Son días en los que lo más fácil sería llorar y hacerme un bollito en la cama, tapada hasta las orejas, dormir y nada más que dormir...
Como no me puedo quedar en casa, ni hacerme un bollito bajo el escritorio de la oficina, advierto apenas cruzo el umbral de la puerta que hoy es lunes. Hoy no me molesten demasiado, si pueden evitarlo no me hablen, no me crucen la mirada.
En estos días extraño ciertos abrazos. Los brazos y el calor. Y eso tampoco ayuda...
Por qué me sucede? No lo sé. Objetivamente mi vida es casi perfecta. Y comparada a otras vidas, es privilegiada, sublime. Pero a mi oscuridad no le importa. Mi oscuridad no sabe de comparaciones ni de relatividades. Para mi oscuridad todo es absoluto y negro.
En días como este no me queda otra que buscar buenos accesorios y tratar de iluminar mi oscuridad como puedo: recuerdos como lentejuelas que salen de la mente y dan brillo al presente... Y ahí vamos, de a poco remontando esos días que, a pesar de que no todo sale mal, todo parece estarlo.
Y ustedes tienen días negros? Cómo los superan?
viernes, 22 de octubre de 2010
De cuando nos tropezamos con la misma piedra
En los últimos tiempos he llegado a la conclusión de que yo soy así, me entrego completamente a mi trabajo como lo hago con mis amistades. En mi trabajo me pagan un sueldo y si la cosa no es recíproca, salgo por la puerta, me pego una vuelta por el shopping, pongo perspectiva y chau.
Qué pasa cuando en las relaciones interpersonales no hay reciprocidad? Qué sucede cuando das oportunidades para luego recibir nuevamente la misma respuesta? La inversión afectiva se recupera? O sólo queda bajar la persiana y moverse a nuevas amistades, aceptando que al final amigos sólo se pueden contar con los dedos de una mano y el resto son circunstancias?
En fin, reflexiones de un viernes... Qué hacen ustedes en estas circunstancias? Amar y perdonar o bajar la persiana?
jueves, 14 de octubre de 2010
De la coquetería (epílogo)

Ejemplo a seguir 2:

Ejemplo a evitar:

De las miserias humanas
Pero tal vez sea más triste ver a profesionales médicos ir de stand en stand acumulando porquerías de la misma manera. Pasan stand por stand, cual procesión religiosa, juntando cuanta muestra, papelito, birome, bolsa, cuaderno, block o bandita elástica se les ponga a tiro.
En el caso del laboratorio para el que trabajo, no damos muestras como otros, pero solemos dar biromes muy lindas y literatura médica de calidad sobre nuestros productos. Cualquier ser humano normal se acerca, mira qué hay y si es algo que tiene que ver con su práctica, conoce el producto, lo usa tal vez, se lleva un ejemplar. No, los médicos y estudiantes de medicina, se llevan lo que sea. "Doctor, conoce el producto?" "No", pero se lleva igual la tabla de dosificación porque, en palabras de uno de ellos, tiene lindos colores. ¡¡¡Tiene lindos colores!!!
O sea, lo que sea me viene bien. A lo mejor yo no me enteré y había una competencia que consistía en juntar la mayor cantidad de porquerías... no sé.
El congreso duró 3 días. Hubo personajes que pasaron los 3 días por el stand a buscar más biromes, más tarjetitas, más lo que fuera que pusiéramos en la mesita. En otra oportunidad hasta pusimos calcomanías del laboratorio, con el nombre y el logo nada más, se las llevaron como quien lleva un tesoro. Otra vez pusimos unas manzanas que habían sobrado de un almuerzo. Se las llevaban de a dos, mirando hacia todos lados como ladrones, para ver si alguien los veía...
Qué se yo... a mí me quedó la sensación de que la próxima vez mejor me trato con un chamán. Me quedó esa cosa de codicia, de angurria... Y pensaba si son así con regalitos pedorros, imaginate con prestaciones médicas, plata al fin y al cabo.
Sí, la próxima me hago ver por un chamán.
De la coquetería...

Queridos hombres, los queremos como son, no necesitan hermosearse tanto... A ver nos los bancamos desnudos y la verdad es que no son muy estéticos así. Ahora, bancarnos teñidos de mala calidad, entretejidos y hasta peluquines, eso ya es demasiado. En serio, los preferimos completamente pelados, pero prolijos y masculinos. No se esmeren tanto, less is better. En serio.
Y ustedes, han tenido encuentros cercanos con pelucas varias?
viernes, 17 de septiembre de 2010
De las carreras
Conozco gente que ha vendido su alma por un viaje, un mini aumento, por una mejor oficina, una silla más cómoda... Hay casos más graves, pero como me tocan muy de cerca, no los voy a discutir.
Lo que me sorprende es que todas estas personas que participan de esta carrera de ratas no se den cuenta de que solamente se los explota, y que no se rebelen ante injusticias tales como trabajar horas y horas extras sin ninguna retribución, perder novios, amigos y familia a causa de esto... Y todo por el supuesto prestigio de trabajar en una multinacional.
Hoy justo me crucé con esto, y me puse a pensar en una charla que tuve anoche con mi amiga Laurita: Nadie te entierra con tus pertenencias, ya no somos faraones. No te vas a la tumba con tus dólares, ni con tus ahorros cualquiera fuera la denominación. Tampoco la gente se va a acordar de vos por lo mucho que ascendiste en tal o cual compañía. Hace unos meses fallecieron dos personas en la multi donde trabajaba, una un director muy importante, trabajó hasta que se murió. De qué le valió? La Nación muy agradecida por las participaciones. El otro el papá de un colega, que le dedicó su vida a la empresa, ni siquiera eso...
Entonces, qué es lo importante? Para mí, como siempre escribo, mis afectos. Porque al final de cada día, cuando estoy bien o mal, cuando estoy cansada o con pilas, los que comparten conmigo mis alegrías y sobre todo los que me bancan cuando el día no fue bueno, son mis afectos. No es mi amex gold, ni mis ahorros, ni el título nobiliario que me dan en la oficina.
Afortunadamente hoy trabajo en una empresa que conjuga las mejores cosas que un trabajo puede tener: buen jefe, una tarea a desarrollar divertida, un excelente grupo de compañeros, un buen clima laboral, posibilidades de crecimiento genuinas y justas. Y por hacer todo lo que me gusta hacer me reconocen y me pagan.
Sé que estoy viviendo lo mejor de ambos mundos: disfruto de mi vida profesional y de mi vida personal. Tal vez sea la experiencia que dan los años, tal vez sea sólo suerte...
Y ustedes? Rat Race o vida balanceada?
martes, 7 de septiembre de 2010
De degustaciones afortunadas
Llegamos al Hotel Savoy (Callao y Perón) alrededor de las 6pm. Nos recibieron con copa de champagne y cosillas para comer. Todo muy rico, pero a la segunda copa de espumante, ya estaba lista para irme a dormir. Dejando de lado algunos detalles que no vienen al caso con el plantel de Racing que concentra en el hotel, finalmente pudimos subir al salón para la degustación... de más alcohol.
Cuando dan inicio a la actividad, me entero que el evento era para el agasajo de secretarias. Ahí me cayó la ficha del por qué de la fauna presente. Había de todo: Desde mi amiga Nany, que es asistente, pero perfil profesional (hago esto mientras estudio, y si pudiera, de tanto en tanto, envenenaría a mi jefe), mi amiga Laura, perfil idem (pero ama a su jefe, lo considera perfecto y no lo cambiaría por nada del mundo), y las otras...
Edad promedio, 50 años. El rango de "arregladez" iba desde onda secretaria ministerial de Gasalla a "hace siglos que mi cabeza no ve un peine, ni una buena tintura". El grado de brujería, que ya hemos hablado de este tema en el blog, cuando pertenecía al gremio, iba de madrastra de Blanca Nieves, a Cruela de Vil. Y las preguntas!!!!!!!!!!!!!!
Creo que nunca un sommelier se debe haber ido tan frustrado de una degustación. Las preguntas versaron más sobre el chocolate que los vinos. Y sobre los chocolates especiados. Cada vino que probábamos era una buena excusa para sacar a la luz una vez más los chocolates especiados. Lo que me hizo sospechar que la señora en cuestión había visto hacía muy poco Chocolat o la había visto muchas veces o es su película favorita...
Por supuesto que mi mesa era la que más onda tenía... y las brujas de una mesa vecina, nos mandaron a callar... porque no les quedaba claro si el chocolate era especiado o no. Se deben haber querido atragantar con el chocolate (especiado o no) cuando cada una de nosotras se ganó un premio en el sorteo final: una caja de chocolates, un almuerzo o cena en el hotel y una estadía en el mismo. In your face!!!!
Qué se ganaron en sorteos? Alguna vez les pasó de no dejar un solo premio sin ganar?
lunes, 30 de agosto de 2010
De los vecinos ruidosos
Hasta hace unos meses sólo tenía que lidiar con los gritos de los del 2do piso. Familia tipo: mamá, papá, nena y nene. Familia tipo gritona. Las peleas entre los conyuges, un deleite digno de telenovela venezolana. Los gritos a los menores, para hacer un manual de qué no hacer con tus hijos, de la A a la Z. Ya estaba acostumbrada los fines de semana a escucharlos pelear, volar platos, utilizar los epítetos más desagradables... Pero era sólo en fines de semana, y a la hora del almuerzo por lo general. Y llegaron los del 1ro.
Poco tiempo atrás se mudaron dos hermanos al 1ro. Al principio todo era amor y paz. Hasta que empezaron los viernes de amigos. Y hasta acá todo ok. Pero aún en invierno, con 2°C, dejan la ventana del living abierta mientras hablan a los gritos, y joden a los gritos hasta las 3am del sábado... Inadaptaditos de mi alma, viven en departamento, con otra gente, no solos, y tienen ventanas, ciérrenlas por favor, gracias!
Las palmas se las lleva mi vecina de planta baja. La vieja nunca fue buena vecina, nunca fue simpática, jamás tuvo palabras amables. No la quiere ni su familia. Cuando pusimos el cerramiento en el comedor diario, la vieja se ocupó de tapar con silicona los agujeritos de desagote de las ventanas, para que no se le mojara la medianera -no, porque si llueve y no hay cerramiento, la lluvia pasa de largo por tu medianera, vieja pelotuda-. Desde hace un tiempo que está postrada, sorda y la cuida una pobre chica que la padece. Su familia no la visita, apenas la hija de su marido (la hijastra), para controlar una vez por semana. El viernes pasado la vieja empezó a gritar y golpear las paredes con el bastón a las 4am: "Me están robando!! Ayúdenme!!! Me están robando!!!" Y la pobre chica que trataba de calmarla. Los gritos siguieron hasta las 6:30am a intervalos irregulares, cosa que yo no pudiera volver a dormirme...
El viernes nos habían invitado a pasar una noche en el Howard Johnson de Campana, para probar las instalaciones, ver qué tal el servicio, etc. Lo tomé como una excelente oportunidad además para descansar de los hermanos del 1ro y de la vieja de planta baja, y dormir decentemente una noche de viernes, luego de una semana verdaderamente masacrante.
Pero como siempre, la abuelita Beatriz estuvo presente con su viejo y recordado dicho: "Cuando la niña pobre sale a bailar...". Nos dieron una de las suites del hotel (tiene 2, una con dos camas twin y otra al lado, con una king size). El baño tenía un tema con la ventilación y apestaba. Y los vecinos... los vecinos! Nunca sabremos si el señor era un señor o una foca. Ella digna de canal Venus. Se entretuvieron toda la noche, generando en mí dos cosas: 1) mucha envidia y 2) ganas de matar al contructor por la pésima aislación acústica de las habitaciones. Estuvieron gran parte de la noche jadeando y gritando y gimiendo, y con renovados bríos comenzaron nuevamente a las 8:45am.
De todos modos, querida vecina de la habitación 144, no te lo cree nadie!!! Creo que si hacés una audición para PlayboyTV o Venus, entrás seguro!!!
En fin, en octubre me mudo. Entre mi vecino/a y mi cama, está mi baño. Del otro lado, el balcón y el pulmón de manzana. Espero dejar atrás las vociferaciones, las peleas familiares, las viejas molestas...
Y de vecinos cómo andan ustedes?
martes, 24 de agosto de 2010
De los momentos de relax
En ese entonces comprendí que lo mío eran los mimos, que me mimaran, MUCHO, que me hicieran masajes, que pudiera tener a disposición un hidromasaje, una sala de relax con aromaterapia y mantas suavecitas, aguas saborizadas a voluntad... en fin, una vida de mimos y placer a full.
Este año para mi cumpleaños me regalaron un cupón para disfrutar de una hora completita de masajes (60' de manos y aceites esenciales recorriendo mi cuerpo desde la punta de la cabeza hasta los dedos meñiques de los piés), más uso de hidromasaje, sauna finlandés y sala de relax.
Tardé cuatro meses en encontrar un día ideal para disfrutar mi regalo, CUATRO MESES. Finalmente, la semana pasada, luego de tres semanas de eventos, reuniones, estrés laboral, llamé al Spa Ser y saqué turno para mi sesión de mimos.
Por supuesto que ese día me olvidé del voucher en casa, tuve que volver a buscarlo a la salida del trabajo (que queda a 10 cuadras del Spa y a 30 de mi casa), como era viernes no había un solo taxi, casi llego tarde y por supuesto más contracturada por la cantidad de plata que gasté en ir y volver.
Finalmente me dispuse a disfrutar de mi sesión de mimos. La primera hora, acostada sobre una camilla suave y bajo las expertas manos de mi masajista. Con ganas de quedarme a dormir en esa misma camilla, bajé a ponerme el traje de baño para disfrutar del hidromajase, con la idea de quedarme ahí adentro hasta que quedara toda hecha una pasita de uva, no solo los dedos de las manos y los pies.
Pero, como decía mi abuelita Beatriz, cuando la niña pobre sale a bailar, los músicos se van a pishar. Estaba yo muy contenta, sola, y relajada, en el sauna cuando escucho algo parecido a una bandada de loros barranqueros en el jacuzzi, pero más agudo. Cuando emerjo de los vapores aromatizados del sauna, veo con horror la siguiente escena: al centro del grupo, una señorita con una tiara de plumas y brillos blanca (de esas que se usan para las despedidas de soltera, sí), y rodeándola otras 3 ocas que graznaban sin parar.
Y ahí volví a mi estado granítico... mi momento de mimos y relax se había roto, con la presencia de una casada con un hijo y su charla sobre el pequeño, una embarazada, una de novia y la que se estaba por casar... Creí que me iba a dar alergia de tanta felicidad. Pero más allá de eso, lo que me puso de muy mal humor fue el poco respeto por las reglas... por el derecho al relax de los demás...
En fin, luego de tratar de volver a mi estado alfa por varios minutos, me duché, me vestí y me fui. Qué va'cer... a veces se gana, a veces se quiere matar a alguien...
Experiencias frustradas en los últimos tiempos? Alguno quiere compartir?
lunes, 19 de julio de 2010
De los viajes 4
Así que antes de salir de Buenos Aires hice todo lo que me recomendaban, saqué el seguro, me fotocopié los recibos de sueldo, imprimí la carta de invitación del Colegio para mi reunión de egresada, puse las tarjetas bien a mano.
Luego del viaje a los infiernos, sólo podía pedir que mi paso por migraciones fuera menos tortuoso. Me encomendé a Ganesh, el que abre las puertas, y me puse en la cola de extracomunitarios junto a un amigo que encontré en el vuelo (el muy guacho ni se enteró de todo lo que conté porque se durmió TODO). Cuando finalmente me toca pasar, entrego mi pasaporte y tengo a mano todos los papeles que me pueden llegar a pedir.
El policía ni siquiera me mira. No me dice ni buen día. No me pregunta ni a dónde voy. Me sella el pasaporte y me lo devuelve: Bienvenida a Roma, chiquita!!!!
Con mi único equipaje, una maleta de cabina, me dirijo exhausta pero feliz a la salida. Me espera Roma, mi ciudad en el mundo.
Por supuesto que mis dos celulares han muerto en vuelo, estoy sin batería y sin posibilidades de ponerme de acuerdo con Lucry sobre el punto de encuentro en Termini. Me compro una tarjeta para hacer llamados. Cómo han aumentado los precios, una tarjeta que compraba hace 5 años por 10 euros, ahora la pago 35. O me vieron la cara, o la crisis pega fuerte.
Logro comunicarme con Lucry, que está detenida en algún lugar de Roma por los Carabbinieri, porque su registro para conducir ha vencido hace 6 meses. Chau viajecito ráfaga a Roma... qué pena, voy a tener que volver.
Decido minimizar las pérdidas y me voy a comer un panino bien italiano: prosciutto e mozzarella. El día que los panaderos del mundo aprendan a hacer un pan como el de acá, seré feliz. Es un panino de aeropuerto, pero es delicioso! Crocante, doradito, ñam! Mientras como el panino, estreno la Moleskin, primera compra del viaje. Escribo el descenso a los infiernos made in Aerolineas.
Pero como algo bueno debo haber hecho en esta vida, cuando llego a la puerta de embarque de mi vuelo a Trieste, Roma me regala una puesta de sol que me deja sin palabras. Me siento y saco fotos con el celular y con la cámara. Le saco fotos al sol, a las golondrinas romanas que vuelan por el Leonardo Da Vinci, a mi pie frente al sol.
Pasaron 5 años desde mi última vez en Italia. Esta vez sin expectativas, sin ansiedades, sin nervios. Roma, sola y la puesta del sol, que a este punto va a culminar a las 21. Y yo que vengo del frío polar y la oscuridad, agradezco este sol de noche contemplando mis próximos días en silencio...
jueves, 8 de julio de 2010
De los descensos al Averno - Cont.
Ya dentro de la sala de espera, y sin tiempo para hacer una terapéutica visita al freeshop, nos llaman a embarcar casi inmediatamente. Primero llaman al Arca de Noé en todas sus presentaciones: familias enteras con niños de las más diversas edades pre-adolescentes y... y... UN GRUPO DE ADOLESCENTES DESENFRENADOS EN CAMINO A UN VIAJE DE ESTUDIOS / EGRESADOS!!!!!!!!!!!!!!! Este nuevo elemento en mi viaje amenazaba con hacer de mi travesía un descenso al Averno, pero a 10.000 pies de altura. Como siempre, Murphy demuestra su ley en todas sus aplicaciones. Juro que no estoy inventado nada...
Llego a mi asiento, y esto recién empieza: Familia Telerín que viaja por primera vez con cría de 2 años, sentada delante de mí, cuyo padre anuncia a todo el avión: "Yo pagué el asisento de la nena!!!", mientras exige que los acomoden nuevamente, ya que les dieron un asiento separado (son él, su esposa y la pequeña), al otro lado del pasillo. Toda la escena me remite a Pinti, cuando habla de los argentinos que viajan a Italia...
La niña lloró, gritó y rompió la paciencia todo el viaje, a intervalos regulares, mientras se turnaba con la vieja italiana que se levantaba de su asiento para ir al baño, y pasaba por el mío y sacudía mi respaldo cual terremoto chileno. O sea, entre los dos extremos etarios no me dejaron pegar un ojo. Apenas lograba conciliar un mínimo de sueño, tarea álgida en los excelsos asientos que se reclinaban generosamente 5°, o lloraba la cría o era el turno baño de la vieca. Gracias Odino...
Debo decir que había gente en el avión que la pasaba peor que yo. Se llevaban los premios al viajero abnegado y por qué no, un poquito pelotudo. La primera vez que voy a buscar agua a la estación de azafatas, observo dos señoras sentadas en el espacio de la puerta, una sentada en el asiento que usan las azafatas para el despegue y aterrizaje, la otra sobre una caja de aluminio, las de almacenamiento. Pensé que estarían cansadas de sus asientos, o de los gritos de la niña, o el terremto de alguna vieja... Ingénua!!! El vuelo estaba tan pero tan lleno y sobrevendido que había tres personas sentadas en lugares improvisados, seguramente ilegales y potencialmente peligrosos, para todos...!
De este primer tramo de viaje saco entonces un par de conclusiones:
1) Así como muchos piden el voto calificado, yo exigo y demando emisión de pasaporte calificado, así me ahorran la vergüenza ajena!!!!
2) Aerolíneas Argentinas es una mierda. No sé cómo levanta vuelo el avión en el que viajo, parece de la época de los hermanos Wright.
Stay tunned, más a venir...
martes, 6 de julio de 2010
De los descensos al Averno
Escribo estas líneas mientras me como el primer panino italiano, con prosciutto de verdad y mozzarella de verdad. Escribo en una Moleskin nueva. Hermosa. Muy a lo Hemingway. Pero traspaso los primeros apuntes de viaje de una bolsa para vómitos de Aerolíneas Argentinas. Que a decir verdad se adapta muy bien a la temática que apunté durante 13 largas horas de viaje. 13, un presagio.
Mi mamá, mi abuela, y la sabiduría popular enuncian: "Lo barato sale caro". Tal vez no en términos netamente económicos o financieros, me explayo un poco más: Compré para este viaje de una semana a Italia, el boleto más barato con disponibilidad que era Aerolíneas Argentinas. Más allá de la ventaja de ser un vuelo directo a Roma, no hay más nada. No hay más ventajas. Tal vez llegue a horario, tenga todas las comidas incluidas, bebidas no alcohólicas libres durante todo el viaje, pero saben qué?, las secuelas psicológicas que este vuelo ha dejado en mí, sólo podrán ser curadas con muchos años de terapia, MUCHOS.
Empecemos con un breve racconto del pre-embarque. Aerolíneas Argentinas tiene su propia terminal en Ezeiza, la terminal B. Hace honor a su nombre: Es B en todos los sentidos. Para pasajeros de segunda clase. Poco espacio, mucha gente, poco personal. Las muestras de civilidad por mi parte fueron tomadas de mala manera por una señora mayor ("para pasar con esa m... tanto apuro") a la que mi padre contestó: "pero qué fina la señora!".
Hacer seguridad y migraciones, un parto. Un sólo scanner para procesar dos vuelos. Dos de los grosos: Roma y Madrid. Visualizan la cosa, imaginan bien? Bueno, es peor. Sobre todo cuando tus peores pesadillas se materializan en el cuerpo de 10 adultos y otros tantos bambini que pasan delante de mí, porque los menores tienen prioridad, y anuncian a los gritos "Vamos a Roma!!!"
Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
lunes, 21 de junio de 2010
De cómo pasan cosas inesperadas 2
lunes, 14 de junio de 2010
De las rachas
Este fin de semana tuve de todo, desde complicaciones de salud familiares, cancelaciones de deptos que iba a ver para comprar, y hasta Messi le erró a un gol que era imposible por culpa de la maldita Jabulani...
Pero el festival de cancelaciones empezó con la cancelación de una cita. Cita convocada por él, no por mí. Encuentro propiciado por él, no por mí. A ver si se entiende: Nadie lo fue a buscar, vino solito. Y por segunda vez en menos de dos semanas, canceló a último minuto...
Y por supuesto, este evento abrió las compuertas de la desgracia canceladooooraaaa: El viernes, la cita, el sábado, la visita a un depto y la salida de la noche (justificadísima por mi amiga Vir, que tenía que ver a un amigo que se va a vivir afuera), el domingo me cancelaron la visita de un depto para el lunes... Si me cancelan algo más, me incazzo, pero MAL.
Sépanlo, hombres, no se busca a una señorita para cancelarle el encuentro una hora antes. No es educado, no es caballeroso y nos deja re contra re calientes (no en el buen sentido precisamente) por unos cuántos días. Así que, la próxima vez que me invites a nada, asegurate que no tengas nada pendiente, que no te salga un programa imprevisto, que no se te muera el canario ahogado... porque después, como las cosas no llegan solas, me llueven el resto de las cancelaciones... OK?
He dicho.
lunes, 24 de mayo de 2010
De las cosas que no se hacen...
lunes, 17 de mayo de 2010
De cuando las cosas se complican
A las pruebas me remito: el viernes vino a comer y ver pelis a casa mi amiga Ro. Como yo ya estaba empijamada, cuando llegó el delivery de sushi, fue ella a abrir, pagar y traer la comida. Nos quedamos mirando series, pelis, etc. hasta las casi 2 a.m. Llamé a un taxi para que la llevara a su hogar, y cuando el taxi llegó, las llaves bien gracias, no estaban por ningún lado. Luego de varios minutos de llantos, recriminaciones y pensar en lo que me iba a salir el chiste, nos fuimos a dormir, no sin antes amenazar a la otra pascuala para que depusiera su actitud de dormir frente a la puerta por si quien había encontrado la llave entraba a robarnos, violarnos y matarnos en el sueño.
A la mañana siguiente, yo que tenía planificadas mil cosas para hacer en la casa, me levanté temprano, me bañé y a las 8:30 a.m., lo que nunca, recibí llamado del padre de mi ahijada (que nunca jamás llama tan temprano, por lo cual...). Para pedirme si podía ir a cuidar a mis sobris, porque la madre estaba medio medio.
Con lo cual a todo lo que tenía que hacer, menos buscar copia de la llave de entrada, quedó en suspenso. Hice la recorrida de cerrajería, pregunté cuánto me iba a salir el chiste del cambio de las llaves de entrada y de mi casa, y luego, implorando a los dioses que algún buen sanmaritano hubiera encontrado mis llaves, partí a cuidar a los niños.
Por suerte la cosa se resolvió muy fácilmente cuando los vecinos del 1° devolvieron las llaves extraviadas a mi vecina Susi. Y volvimos a respirar aliviadas. Gracias por el delivery de helado, los chicos encontraron las llaves casi inmediatamente. Pero como nadie lleva un cartelito con nombre y apellido en sus llavero...
Pero cuando las cosas se complican, se complican no? Alguna vez les pasó? Yo creo que por unos días estoy inmunizada...
viernes, 7 de mayo de 2010
De los viajes 3
viernes, 30 de abril de 2010
De cómo pasan los años
miércoles, 28 de abril de 2010
De los viajes 2
lunes, 5 de abril de 2010
PD: Roncás...
jueves, 18 de marzo de 2010
De las modas
jueves, 4 de marzo de 2010
De los machos 3
viernes, 26 de febrero de 2010
De los cautivos 2
Cuando era chica soñaba con ser una émula de Jacques Cousteau… dar vueltas al mundo explorando los recónditos rincones de los océanos, buceando con ballenas, delfines y aguas vivas… Por eso la noticia de que un entrenador del SeaWorld de Orlando fue arrastrado por una de las orcas hacia el fondo de la pileta por un minuto, en el fondo, me arranca una sonrisita.
Claro que también pienso que en parte este tipo de lugares ejercen una labor pedagógica: los millones de niños y adultos que año a año han educado estos shows no pueden pasar desapercibidos. Creo que existan pocas personas que hoy en día crean que la orca es realmente una ballena asesina (a menos que no seas un lobo marino y que una orca se haya comido algún miembro de tu colonia… y que no sepas que en realidad la orca es un delfín grandote)
Pensaba en cómo puede una profesión, un trabajo, convertirse de un momento a otro en una cosa peligrosa. El entrenador salió con apenas un metatarso quebrado y un susto no despreciable. Cuando uno trabaja con un animal que pesa 6 toneladas y mide 6 metros, el trabajo se torna impredecible. Por más inteligente y sociable que sea la criaturita, sigue siendo un animal salvaje que pertenece al océano, no a un estanque. Pero esta reflexión no es sobre la libertad de las orcas…
No hace falta trabajar en un acuario para sentir que a veces nos sacan el aire por un minuto. O pensar que nuestro ambiente de trabajo está lleno de “pesados”. Todo trabajo conlleva sus riesgos. Sus consecuencias… Sólo algunos afortunados pueden darse el lujo de ir por la vida sin profesión alguna. El resto tenemos que dedicarle unas ocho horas diarias a empujar un lápiz para llegar a fin de mes, cuando llegamos…
Qué diferencias hay entre el entrenador y cualquiera de los comunes mortales que nos sentamos detrás de un escritorio de lunes a viernes, o hasta sábados? No muchas. La primera que se me ocurre es que seguramente la pasión y el amor del entrenador por su orca dista mucho por lo que sentimos por nuestra computadora. Conozco pocas personas apasionadas por una planilla de Excel o por una presentación. Siempre hay casos, y francamente los envidio. Otra que nosotros no usamos trajes de neopren para venir a la oficina. Claro que si el clima sigue cambiando, tendremos que empezar a pensarlo. Tampoco le damos trozos de pescado a las personas que hacen un buen trabajo alrededor nuestro (menos mal).
Pero pensemos en las semejanzas: Qué diferencia hay entre una orca que te arrastra al fondo de un estanque con ciertos tipos de jefes que te arrastran hasta las profundidades del abismo del razonamiento? De los que te hacen bucear en el abismo de la desinformación? De los que te dejan sin aire y sin palabras a la hora de la devolución de las evaluaciones? No terminarás con el metatarso roto, pero que te rompen algo, siempre es cierto.
Cautivos de una orca, cautivos de un escritorio… Al menos el entrenador no se maquilla a la mañana para venir a la oficina. Ni se pasa la planchita por el pelo. Tal vez ni se afeite.
Quiero mi orca ya!!!
De los cautivos
Justo en estos días en que se debate sobre si las orcas deben o no estar en un acuario (creo firmemente que deben estar en libertad, pero gracias a Mundo Marino muchos chicos estudiaron Biología Marina u Oceanografía), recuerdo ese primer post en el que comparaba mi empleo de ese entonces y otro accidente en un acuario, en el que una orca había ahogado a su entrenador.
Somos cautivos de lo que nos apasiona. Lo que nos apasiona para bien, como puede ser un trabajo que se disfruta, un hobby, un amor. Pero nos cautiva y nos apasiona, para el lado más oscuro, aquello con lo que tenemos una atracción negativa: un trabajo que aborrecemos pero que no dejamos, un amor que no es amor pero que no dejamos. Como le pasa al entrenador de la orca, que no pongo en tela de juicio ama como a un hijo, pero que entiende que debe estar en libertad.
Qué hace que nos quedemos en lugares que no nos gustan, que no nos dan satisfacciones, que nos lastiman? En el caso de mucha gente que conozco, se queda en el trabajo que tiene porque no tiene alternativa económica. Hay empresas que pagan bien, pero lo cobran en el maltrato diario. Hay personas que elijen quedarse al lado de alguien que saben no es para ellos, porque para esas personas quedarse solos es una alternativa peor.
Otras personas aborrecen el lugar donde están, se aferran con alma y vida a la puteada diaria, y no hacen siquiera el esfuerzo de buscar alternativas. Las conocen no? Todos conocemos a estas personas. Hacen de la queja un arte. Del lamento un credo. Es su alimento para el alma, si no están infelices, no pueden vivir. Y seguramente todos hemos pasado por una fase en la que fuimos esas personas. Yo sé que fui uno de esos. Por suerte se puede salir de esa, siempre que se quiera.
Tal vez sea porque hoy es mi último día en un trabajo al que aborrecí, y estoy feliz de dejarlo atrás. Tal vez sea porque en el camino, esta posición me enseñó mucho. Sea lo que sea, agradezco no estar más cautiva, al menos no de este lugar.
De qué están cautivos? Quién o qué es su orca?
viernes, 19 de febrero de 2010
De los cambios de rumbo
Pasa con las relaciones personales, pasa con los trabajos, pasa con todo.
Estoy viviendo casi mi última semana en mi actual trabajo. Hace casi 8 años y medio, entre primero y segundo intento, que estoy en la misma empresa, y casi 15 años en la misma industria. Este trabajo me permitió muchas cosas: recibirme, viajar, crecer, vivir. Me dio amigas entrañables. Me dio jefes notables. Me dio enemigos dignos y enemigos infames. Por un tiempo me dio la fuerza para salir de la cama cuando no había otra cosa por la cual salir. Me dio satisfacciones profesionales como así también dolores de cabeza. Pero llegó un momento en el que solamente fue un sueldo a fin de mes. Un sueldo muy sabroso por cierto, pero sólo eso.
Creo que haga lo que se haga en la vida, tiene que hacerse con pasión y compromiso, porque como muchas veces me dijo mi padre, "hay que ser el mejor carnicero del barrio". Que obviamente no quiere decir eso literalmente, no?
Y gracias a Dios, a Ganesh que abre las puertas, a mi equipo de rugby de ángeles guardianes (y seguramente también a mi capacidad), siempre surgió otra oportunidad cuando una se agotaba. Y esta vez no fue la excepción.
Me voy a otra empresa, a otra industria, cambio completamente de ramo y me salgo de mi zona de confort, apostando a un proyecto nuevo que me da espacio para crecer y hacer uso de mi creatividad. Y estoy feliz de aceptar el desafío.
El año del Tigre se viene con todo!!! Y su año del Tigre, cómo viene?
viernes, 5 de febrero de 2010
De San Valentín
Cada blog que leo (de diseño, de cocina, de moda) hace referencia a la fecha. Corazones, rosa, pasteles, hasta los ipods se disfrazan de Cupido...
Y yo, que soy ácida, pero ácida nivel muriático, siento que mis dientes involuntariamente rechinan ante la catarata de corazoncitos, el dulzor, el amor, arggggggggggghhhhhhhhhh!!!
No sé qué pasaría o sentiría de pasar un solo 14 de febrero en pareja. Pero creo que sería lo mismo. O es todo el año la celebración del amor que sentís por la persona que tenés al lado, o sos un hipócrita consumista... Y sobre todo cuando hablamos de amor.
Porque en serio, el día de la madre, el día del padre, el día del niño, son todos días para homenajear a alguien. Pero San Valentín? Qué es el día para decirle a alguien que te gusta? Open Season para declarar tu amor? Es legal decir te quiero ese día? Y el resto del año?
Me tienen al plato con San Valentín por todos lados, al plato! Amen a quien tengan al lado todos los días, respeten a quien amen, TODOS LOS DIAS, demuéstrenlo TODOS LOS DIAS. El 14 de febrero no es el día de la moratoria para las demostraciones afectivas eh!?
Alguien más detesta esta fecha? O soy solo yo?
jueves, 4 de febrero de 2010
De qué pasa cuando no me voy de vacaciones...
Me tomé el fin de semana largo de fin de año para irme a Mar del Plata y esperaba que esos 4 concentradísimos días sirvieran para tirar hasta la Semana Santa. Más allá de que ese fin de semana la pasé genial y me desenchufé como si fuera una semana en vez de 4 días, la cosa es que hoy, 4 de febrero me encuentro deseando, añorando unas vacaciones cortitas, mínimas, aunque sean de minutos, para poder llegar sí a Semana Santa.
No es que no haga cosas para desenchufarme y descansar los fines de semana: pileta en casa de amigas (gracias Fifu), salidas al cine, teatro, siestas interminables... Pero dónde está la playa? Dónde una hamaca paraguaya para dormir bajo el cocotero? La piña colada en la pileta? Eh?
Todavía no inflé la pileta de casa (1 metro de diámetro, 20 cm de profundidad -o eran 15?-). A lo mejor es eso, el tener que bancarme el calor y los mosquitos en la ciudad de la furia, sin siquiera mojarme las patas cuando salgo de la oficina... Tal vez sea la nostalgia de las playas doradas o blancas o el color que te guste punto com de Costa Rica... Lo que sé es que tengo unas ganas incontrolables de tomarme vacaciones. YA!
Y ustedes qué decidieron hacer con su verano?
martes, 26 de enero de 2010
De los descubrimientos científicos...
Descubrieron que tener sexo dos veces por semana reduce las posibilidades de sufrir un ataque a cardíaco a la mitad.
Ok, siempre dijimos que era buen ejercicio no?
viernes, 22 de enero de 2010
De la desinformación
Cuando haciendo zapping llego a C5N, justo estaban mostrando los titulares de Diario Popular. Casi como noticia de tapa, leo “Chica de 20 años con cinturón gástrico tomó alcohol y murió en Villa Gesell”
Los que me conocen saben por qué esta nota me llamó la atención. Entro a ver qué sarta de imbecilidades podrían haber escrito:
- Confunden bypass con cinturón gástrico.
- Creen que la dieta estricta luego de la operación es una complicación de la cirugía.
- ““Estuvieron varias horas en el pub, conversando y divirtiéndose. La chica tomó un poco de fernet. Sus amigas dicen que fue muy poco lo que bebió, así que no podemos afirmar que ése fue el detonante del colapso que padeció después”, explicó el comisario.” Pero por las dudas ponele de título que fue por el alcohol y el bypass.
La obesidad es una enfermedad. El cuerpo de una persona con obesidad acumula cosas que otros cuerpos no. El bypass o el cinturón son formas de controlar esa enfermedad. Como toda operación puede tener sus complicaciones. Pero si se siguen todas las recomendaciones del cirujano, el médico clínico y nutricionista, por lo general, no hay problemas. Y lo digo con conocimiento de causa.
Este tipo tratamiento de la información no hace más que meter ruido y estigmatizar aún más a las personas que padecen esta enfermedad. Ayer leía en el blog de Kaye Bailey, una periodista operada, que cuando un bariátrico, un paciente que padece obesidad, tiene una recaída se lo condena, es su culpa, pero cuando un paciente de cáncer tiene una recaída, es culpa de la enfermedad, y se lo compadece.
Infórmense, lean, investiguen, pregúntele a los que saben. Sean responsables con la información que suministran. Si no, al final, Cristina va a tener razón…
Update 1: La chica tenía una hepatitis severa...
Update 2: No le habían hecho un bypass gástrico sino un bypass hepático...
VEN QUE SON UNOS IRRESPONSABLES????
miércoles, 13 de enero de 2010
De las costumbres argentinas
Encuentro la campaña del "Eeeeey" del Gobierno de la Ciudad, si bien loable, bastante molesta. El rockero ese molesto gritando es insoportable. Además no hace suficiente incapié en el tema limpieza y respeto de las leyes (si mal no recuerdo, en el caso de los perros, es obligatorio salir con bolsita y palita)
No veo que la ciudad esté más limpia. Y sigo viendo automovilistas que tiran los papelitos de lo que sea por las ventanillas. A pesar de que la mayoría de los lavaderos de autos provee una bolsita para tal fin.
Es una costumbre argentina / porteña ser mugrientos? Cuesta tanto guardarse los papelitos en los bolsillos, carteras, etc. hasta encontrar un cesto (que admito a veces escacean, sobre todo en la perifería, pero sobran en el centro)?
Y la verdad ya me da cosa discutir con la gente que va tirando cosas por la calle. No llegaría nunca a ningún lugar... Si no es la señora que saca a pasear al caniche, es el tachero que tira el envoltorio del caramelo...
Y si nos empezamos a respetar y dejamos de hacer de nuestra casa un chiquero? Eh? Qué les parece?
viernes, 8 de enero de 2010
De las buenas costumbres

miércoles, 6 de enero de 2010
De cuando se te cae la estantería…
Ayer salí a despejarme al medio día y no pude parar de llorar en todo el trayecto al banco y regreso.
Es muy loco lo que pasa cuando se bajan las defensas y se contempla la propia vida sin anteojos rosas, o filtros de ninguna clase. Todo es insuficiente. Todo es poco. Todo es tremendamente insignificante.
Ya no importa el empeño y la garra que le pusiste. Las elecciones hechas son tuyas, el camino recorrido es tuyo, los resultados no son otra cosa que obra de tu propia autoría. Y mirando atrás pensás, esto no es lo que yo quería. Esto no era lo que mi vida iba a ser.
Pero es lo que es. Seguramente en otro momento esté muy orgullosa de todo lo que soy y todo lo que hago. Sin dudas tengo cosas para mejorar, nuevos caminos que recorrer.
Si de algo estoy conforme, orgullosa y no me canso de repetirlo, y es post habitual en estas páginas y en mi Facebook, son mis amigas. Ayer se las ingeniaron para hacerme dejar de llorar primero (y aseguro que era una catarata sin compuertas) y despejarme después, haciendo lo que más me gusta hacer, gastar plata en ropa, je.
Así que, sea lo que mi vida sea en este momento, sé que no me equivoqué del todo. Algo hice bien. Mis amigas son testimonio fiel de esto. Gracias chics, las quiero. Mucho.